
TÍTULO ORIGINAL: The Big Lebowski
AÑO: 1998
DURACIÓN: 127 min.
DIRECTOR: Joel Coen
GUIÓN: Joel Coen & Ethan Coen
MÚSICA: Carter Burwell
FOTOGRAFÍA: Roger Deakins
REPARTO: Jeff Bridges, John Goodman, John Turturro, Julianne Moore, Steve Buscemi, Ben Gazzara, Philip Seymour Hoffman, Jon Polito...

Todo empieza (obviando la introducción ofrecida por la voz en off) con la escena del Nota en el supermercado. Desde aquí ya se nos muestra al protagonista en todo su esplendor: un rápido vistazo a su forma de vestir, a su descuidada barba y melena y al hecho de pagar con un cheque una simple botella de leche, lo confirman. Él es así, en seguida nos damos cuenta. Pasa literalmente de todo, incluso de los matones que le propinan una paliza y que, para más inri, se orinan en su alfombra. Incluso bromea con el chulo que le mete la cabeza en el retrete.
¿Nada le interesa? No. Le importa y mucho su alfombra, los petas, sus cassetes, el maldito coche, las partidas de bolos con sus amigos de toda la vida (esos con los que irías al infierno si a alguno de ellos le hiciese falta), y cómo no la pasta que le hace falta para pagar la comida y el alquiler.

Especial mención merecen John Turturro como Jesús Quintana, un impresentable chulito de bolera que viste de manera harto extravagante; John Polito en un micro papel, Ben Gazzara como el productor de cine porno o Julianne Moore como la hija del magnate Lebowski, una pintora obsesionada con el sexo y que le jugará una mala pasada al pobre Nota.
Hay mil y un detalles dignos de mención: recuerdo ahora la escena del deportivo rojo, o la pelea en las afueras de la bolera o ese arranque detectivesco del Nota cuando, queriendo saber lo que ha escrito el personaje de Ben Gazzara, pasa un lapiz sobre el papel y se encuentra una extraña sorpresa. Cómo me he reído viéndola de nuevo.

Una comedia negra que no deja títere con cabeza. Se ríe de todo y nos contagia esa sonrisa sardónica con que está rodada, imprescindible. No dejéis de verla, o de volver sobre ella si ya la conoceís.