Blog personal de Alejandro Castroguer

En este blog podrás estar al tanto de las noticias que generen las novelas "GLENN" (Premio Jaén de Novela 2015), "LA GUERRA DE LA DOBLE MUERTE", "EL ÚLTIMO REFUGIO", "EL MANANTIAL" y "HOLMES Y EL CASO DE LOS OCHO ESTÓMAGOS", y las antologías "Vintage'62: Marilyn y otros monstruos" y "Vintage'63: J.F.K. y otros monstruos" entre otras. Además, es lugar de encuentro para amantes del cine, la literatura, la buena música y las aventuras del Rey Mono.

jueves, 14 de marzo de 2013

Carlos y Alejandrø

Más allá de las habladurías, de lo que se vierta en oídos proclives a la maledicencia -igual que el veneno ponzoñoso que se vertió en el oído del padre de Hamlet para matarle-, he de confesar que mi relación con Carlos Sisí es más sana y fluída de lo que se ve a simple vista. Nada que ver, por supuesto, con la hipotética guerra entre novelistas que sería tan del agrado de muchos y que estos dan por hecha. Que ambos seamos de Málaga, y por añadidura escritores de género, no es óbice para que nos llevemos como Holmes y Møriarty. O como los supervivientes de Carranque y los zombis. 

En la reciente presentación de su "Panteón"

Todo el mérito es de Carlos, que quede claro. Porque ha sido él quien ha luchado contra viento y marea por mantener esta relación y que, poco a poco, derive hacia un grado de amistad más que promisorio. Ha sido su constancia la que ha vencido mis reticencias iniciales, dándome una lección no sólo a mí, sino a muchos de los maledicentes. Gracias por ello, Carlos.

Nuestro último encuentro tuvo lugar en En Portada Cómics, a cuenta de la presentación de su novela "Panteón", último Premio Minotauro. Cuando Juan Pablo me pidió posar junto a Carlos no puse objeción alguna. Es más, fue un placer. Un placer porque admiro su permanente apuesta por mí y porque pocas veces un escritor ha conseguido más cosas en menos tiempo. 

Portada de su última novela
   
Aunque sé que no, que los maledicentes desdeñarán esta muestra de sinceridad, espero que haya quedado clara mi postura al respecto y que, desde ahora, nadie se lleve a engaños. Ni malmeta, aunque esto es como predicar en el desierto. A poco que se esfuercen esos pocos, Carlos y yo terminaremos siendo buenos amigos. 

Porque él lo ha querido. Porque me he dejado seducir por su talante positivo. Desde este blog, el habitante incierto de la Casa Deshabitada le desea a Carlos el mayor de los éxitos.

9 comentarios:

  1. Es que ese, y no otro, es el espíritu.

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  2. "Ha sido su constancia la que ha vencido mis reticencias iniciales, dándome una lección no sólo a mí, sino a muchos de los maledicentes. Gracias por ello, Carlos". Sorprende el comentario en este mundillo tan carente de autocrítica. Es un gesto que te dignifica.

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  3. Las cosas hay que llamarlas por su nombre. No hay más valor que ese en mis palabras.

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  4. Si este fuera el espíritu general, el género tendría mejor salud de la que de por sí ya tiene en nuestro panorama. A ver si esto sirve de ejemplo.

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  5. Me quit el sombrero ante usted, señor Alejandro. Todos mis respetos....

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  6. Emilio, debería ser el espíritu, pero desde que el hombre es hombre es más rentable el odio y la guerra soterrada. Si lo he hecho público es porque él se está esforzando en que seamos amigos. Y era lo justo.

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  7. Athman, no es para tanto. Sólo un arranque de sinceridad.

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